Es conveniente visitar a su podólogo para que éste le indique si es necesario algún tratamiento ortopodológico (plantillas) o bien realizar visitas periódicas para eliminar durezas, callos, etc.
Cada paciente es diferente y su podólogo le tiene que indicar cuánto tiempo es conveniente hacer un tratamiento quiropodológico.
En este caso es muy importante realizar visitas periódicos, ya que cualquier imperfección (p. ej. callos) o herida en un pie diabético puede derivar en problemas más difíciles de solucionar.
• Debemos procurar que el calzado sea ancho y amplio para que los dedos tengan libertad suficiente para moverse.
• Deben tener suela antideslizante, a ser posible, de caucho o goma, ya que ésta amortigua más que el cuero.
• El tacón no debe exceder los 3-4cm de alto.
• Si es acordonado, con velcro o cremallera es más adecuado, ya que así quede más sujeto y no hacemos 'fuerza' con los dedos para sujetarlo, aunque no nos percatemos de ello.
• Los calcetines que usemos deben ser, a ser posible, 100% de algodón o fibras naturales. También es muy importante que no compriman la pantorrilla, sobretodo si el paciente padece problemas circulatorios.